Bajaré los impuestos… fue la promesa de Calderón

El 25 de abril del 2006 el entonces candidato del Partido Acción Nacional a la presidencia de la república, Felipe Calderón Hinojosa en el primer debate presidencial al explicar cuál sería su política económica aseguró que bajaría los impuestos.A poco más de tres años la situación económica ha cambiado radicalmente en su discurso, ahora solicita al Congreso de la Unión aprobar un paquete fiscal que incluye el 2 por ciento al consumo general, un aumento similar al Impuesto Empresarial de Tasa Única (IETU), entre otros gravámenes.En ese primer debate donde participaron Roberto Madrazo por el PRI; Roberto Campa por el PANAL; Patricia Mercado por el desaparecido PSD; y Felipe Calderón por el PAN, este último desglosaba su política con un objetivo clave: generar empleos bien remunerados.“Primero –decía Calderón en su intervención- Voy a reducir los impuestos para quienes trabajan, producen o generan empleos y voy a simplificar su pago”. Muy distante el tono al utilizado el pasado 10 de septiembre en la comida dentro del marco del primer Foro Internacional de Vivienda Sustentable, en donde daba un mensaje para que fuera aprobado su presupuesto económico enviado al Congreso.“Los costos de actuar ahora, lo sé, son altos, pero los costos de inacción, de la inmovilidad, los costos de que no se puede, son significativamente más grandes y los estamos pagando ahora con creces en los problemas que vive México”.Hace tres años en ese debate, Calderón Hinojosa planteaba también lo siguiente, “voy a bajar la tasa de Impuestos Sobre la Renta, porque los mexicanos que producen, que invierten, que trabajan, que generan otros empleos no deben pagar más impuestos de los que se pagan en otras partes del mundo, eso nos permitirá tener más inversión y más empleo que es lo que busco”. Mientras tanto en su discurso a la nación presentado el 8 de septiembre del presente año, el presidente aseguraba, “Lo he dicho y lo reitero, hoy tenemos que cambiar, no sólo porque es lo mejor, sino también porque ya no quedan otras alternativas; porque el tiempo y los recursos se nos agotan”.Horas más tarde el secretario de Hacienda, Agustín Carstens presentaba el paquete económico a los legisladores federales, en donde entre otros gravámenes está la creación de un nuevo impuesto de 2 por ciento a los ingresos derivados de ventas en cada etapa de la cadena productiva, además de incrementar el Impuesto Sobre la Renta (ISR) para personas físicas y morales de 28 a 30 por ciento, así como más impuestos para el tabaco, la cerveza, otras bebidas alcohólicas, juegos y apuestas y a las telecomunicaciones.El 25 de abril del 2006 la situación era vista con otra óptica por Felipe Calderón, al asegurar que de llegar a la presidencia, “voy a garantizar la estabilidad económica, ¿para qué? Para cuidar tu patrimonio. Voy a garantizar la estabilidad económica para que sigan bajando las tasas de interés y tú puedas adquirir una casa, para que puedas renovar tu cocina, para que puedas verdaderamente adquirir un auto. Voy a bajar las tasas de interés para que haya más inversión en México y haya más empleo”, decía hace tres años.