El nuevo aumento al precio de la gasolina puede reventar a la sociedad en cualquier momento, porque esto no sólo le está pegando a la clase obrera, sino a los propios empresarios, lo que hace necesario que las autoridades fijen precios de garantía para artículos de primera necesidad.David Aguilar Robles, dirigente estatal de la Confederación Revolucionaria de Obreros y Campesinos (CROC), alertó que existen las condiciones para una revuelta social, porque la gente no aguanta esta política económica que en este año ha desfasado los microsalarios.Y estamos hablando apenas de septiembre, porque un ajuste salarial es enero, pero lo más lamentable es que el gobierno federal no quiere reconocer la incertidumbre que se vive en este sector, al señalar que el índice inflacionario se ubica en seis puntos, lo cual es una falacia.Por eso pedimos se fijen precios de garantía para el maíz, frijol, arroz, azúcar, aceite, pastas comestibles, la harina, y otros productos que realmente puede consumir los ciudadanos con esos salarios tan raquíticos que se perciben, pero además tenemos que reconocer que a los empresarios también les están pegando estos aumentos y los impuestos que aplica el gobierno.A esto se sumó el dirigente de la CTM, Claudio Guerra López, al manifestar que nunca como ahora se percibe un ambiente de hartazgo contra el gobierno por los constantes aumentos a la gasolina, porque es lógico que esto ocasiona los incrementos en artículos de primera necesidad.La clase trabajadora no está pidiendo un favor, sino exigiendo sus derechos, porque el bienestar de la familia es algo consagrado en la Constitución, pero que hasta el momento no se cumple, a pesar que nuestro presidente de la República se dice nacionalista, pero que en estos dos años se ha olvidado de sus compromisos.A su vez, el dirigente de la Cámara Nacional de Comercio en Oaxaca (CANACO), Ernesto Gutiérrez, dijo que a todos les pega el aumento a la gasolina, incluso a los empresarios porque esto modifica muchas veces sus inversiones, pero lo más lamentable es que se les señala de ser los malos de la película, cuando es indudable que incrementar precios en los combustibles modifica todo.El sector energético es lo que mueve a este país, y si se generan estos aumentos se tienen que ajustar los precios en todos los artículos, lo que impacta a las mismas empresas se quiera o no, incluso más a los oaxaqueños, porque ni siquiera nos recuperamos de los hechos de 2006, en donde más de 600 negocios cerraron.
Helguera. El otro atentado.
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